CARPACCIO DE SOLOMILLO DE BUEY
CARPACCIO DE SOLOMILLO DE BUEY
Me encanta la carne cruda, sobre todo si es de gran calidad y de fuerte sabor. Como ésta que es la punta de un solomillo de buey gallego y ya veis su aspecto. Este es un plato que si se come en un restaurante tiene que ser de confianza, asi que, se prepara en casa y gratantía total.
Para preparar este plato es de gran utilidad un corta fiambres -que yo no tengo- las lonchas hubiesen quedado mas uniformes y mas finas. Así que, con la carne semi-congelada y un cuchillo jamonero muy bien afilado, he intentado hacerlo lo mejor posible.
- 300 gr. solomillo de buey
- 150 gr. parmesano
- 50 gr. queso Philadelphia
- 50 gr. queso Camembert
- 100 gr. cacahuetes fritos con miel (ó cualquier otro fruto seco)
- Aceite oliva Virgen Extra
- Pimienta negra
- Sal Maldon
- Reducción de balsámico (opcional)
. Si tenemos el solomillo en el congelador, dejarlo a temperatura ambiente hasta que esté semi-congelado (esto facilita la labor para cortarlo mas fino).
. En un bol mezclar el queso Philadelphia y el Camembert hasta dejar una pasta homogénea.
. Triturar los cacahuetes.
. Cortar el solomillo, ponerlo en el centro del plato dejando un hueco para poner la mezcla de los dos quesos. Moler pimienta negra por encima, unos cristales de sal Maldon y un poco de aceite.
. Cortar láminas de parmesano y las ponéis como queráis por el plato.
. Alrededor del plato se añade los frutos secos triturados y un hilo de aceite por encima.
Si se quiere, incorporar unas gotas de balsámico reducido, os presento las dos opciones, a mi es que me gusta mucho el gusto de este vinagre muy reducido.
No se si he complicado la explicación, porque esto es lo mas fácil del mundo!!
Carmen
Abril 2009
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Comentarios
http://cheffrustrado.blogspot.com/
Nosotros hemos hecho nunca carpaccio en casa, bien es verdad que a mi chica no le gusta nada de nada, dice que le da 'grima' comer la carne demasiado cruda.
Así que te podrás imaginar que no lo hacemos. A mi tampoco me maravilla, pero la he comido muchas veces, sobre todo cuando se puso de moda en los italianos en los 90. Sé que hay muchos adeptos al carpaccio o al steak tartar, y en el fondo lo puedo entender perfectamente, sano, ligero y con mucho sabor.
Si existe algún ingrediente en la cocina que le pegue la pimienta de verdad, es éste.
Un saludo.
Saludos.
Esos frutos secos dulces mezclados con el aceite y luego mezclados con la carne...hay que probarlo...!
Un abrazo
ahora que ha llegado de momento la primavera ya apetece comer platos frios como este.
Besos
mar
A mi también me gusta mucho el carpaccio. Lo hago con zumo de limón, alcaparras y queso parmesano. Tu receta me parece original y deliciosa, se ve realmente apetitoso... Además en estos días de calor dan ganas de comer platos ligeros como este.
Un beso
Sol alguna vez también le he puesto limón, pero prefiero que destaque el sabor del aceite y si es de la variedad arbequina, mucho mejor.
Un beso
Encantada de saludarte.
Verás nunca he comido la carne así, cruda. En principio me da un poco de reparo pero todo será probarlo porque la verdad es que soy muy "carnívora".
Voy a echar un vistazo por tu cocina.
Un abrazo,
María José
Un beso y gracias por tu visita
Un abrazo
Un saludo y me apunto a tu blog. :)
Roberto
Un saludo
Carmen
Un saludo
Carmen
Te diré sin embargo que estoy en contra del cortafiambres para prepararlo. Esas láminas transparentes que se quedan pegadas al plato para mí ni son carpaccio ni son nada. Me gusta mucho más tu carpaccio sin duda. Lo mismo que para el steak tartare, un buen cuchillo bien afilado es parte de la receta!
Besos
Ya no me compro el cortafiambres!!
El steak tartare,siempre con cuchillo, con carne picada, lo has destrozado. El mejor que he comido en restaurante fué en la tienda de vinos de Ortega y Gaset: Lavinia; genial.
Un beso
la pinta es espectacular además la combinación de los ingredientes me gusta , pero nada, que no todo me gusta, he de dejar cosas para los demás!!
Un beso
Que gran idea, Carmen.
Un beso.
Anna
Y la copa de champagne ó cava fria...indispensable !!!
Un beso
Suelo pedir que me lo haga mi carnicero porque si aparezco en casa con un cortafiambres ya me echan tanto trasto jaja
Tienes razón el cortafiambres es un trasto, pero cuantas veces lo echo de menos!! pero resistiré.
He visitado tu blog, cuantas cosas interesantes he visto y que cálido es!
Un beso